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Menos de un año para que concluya. Lo expresé, estamos en la cuenta regresiva del Gobierno de López Obrador, sin importarle las reglas, al final el menosprecio a la ley es su sello, centra su cierre en el fortalecimiento de su candidata Sheinbaum. Las giras del Ejecutivo tienen más carácter propagandístico que de despedida, la inauguración de las obras magnas son un mero pretexto para su propósito proselitista.

Siguiendo con la lógica, no es un partido, las decisiones de MORENA son las que dicta el Presidente, en consecuencia, la lucha interna es para ganar su atención, de paso, su voluntad. La fundamental ya fue tomada, hay candidata, ahora siguen las gubernaturas, llama la atención Jalisco, Puebla y Veracruz, por ser de superior dividendo electoral. 

23 Estados, prácticamente el 70% de la población está en manos de los morenistas, en un sistema en que la influencia de los gobernadores es definitoria en el resultado de la elección por la Presidencia, difícilmente estará en discusión, no así los acuerdos con los opositores.

¿Hasta dónde se pactará? La arrogancia es el principal obstáculo para las alianzas, el poder en las urnas produce la sensación de absolutez, luego emerge la soberbia, privando la construcción de esfuerzos comunes. La concesión de posiciones no es en perjuicio de la democracia, la inclusión de minorías en el ejercicio de gobierno es una sana práctica, el ganador además de escuchar a todos debe permitir su participación. La 4T es sabedora de su poder, en este contexto ¿qué interés pudiese tener en ceder espacios? Pareciere que ninguno.

La oposición sigue extraviada, en el horizonte se dibujan posturas indelebles, por su parte, Movimiento Ciudadano con actores pragmáticos, jugando al distanciamiento en la zona de indecisión. Su objetivo es el acercamiento con las fuerzas que mejor le reditúen. Su apuesta esta en la fluctuación que da el tiempo, mientras más perdure la vaguedad la ambición por su cuota crecerá. El FAM, intenta transparentar sus determinaciones, sin embargo, deja de lado a quienes aportan experiencia, no los escucha, de paso olvida la enorme deuda que los jóvenes tienen con las instituciones, la apertura a ellos quebró la estructura ideológica de la política, Samuel García y Enrique Alfaro son claros ejemplos de practicidad, sus decisiones se sustentan en el exclusivo deseo por llegar, al final de cuentas su materialismo es un posicionamiento político.

Xóchitl Gálvez muestra entusiasmo, perseverancia, pero también ingenuidad. El candor no es un atributo que sea preciado en estos quehaceres, es lado flaco de quien lo sustenta. Gálvez no surge por luz propia sino resultado del desprecio de López Obrador, ahora comienza a desfigurarse como efecto del desdén presidencial. El ejecutivo advirtió que la andanada contra la opositora, sumados con las ocurrencias de ésta, la catapultaron, el antídoto es la indiferencia, le está funcionando.

El discurso de la abanderada del FAM es contra Andrés Manuel, nada nuevo, lo mismo que hemos escuchado durante todo el gobierno, mientras que, la retórica presidencial llenó el espacio de la continuidad, Sheinbaum lo recoge y lo estructura, afirma ser necesaria para la culminación del proyecto de AMLO.

Estamos a once meses de que termine este gobierno, en la práctica acaecerá el día de la elección. Se construye un monopolio que dominará la vida nacional, el perjuicio lo conocemos con el priismo, con una enorme diferencia, había estructura institucional, lo de hoy es un solo hombre, Andrés Manuel.

364 días para que la idea de país concebida por una persona concluya o bien para que se perpetue. 

Añadido:

La sociedad civil es víctima de la violencia cotidiana. La perversidad de los delincuentes no tiene parangón, va más allá de lo humano, lo peor es que se ha acostumbrado, lo usual es lo terrible, lo excepcional es la paz. El discurso de los candidatos en las internas del vecino país se unifica, su prioridad acabar con los carteles mexicanos, la vía: intervención militar.