Está Cabral-La Salida de Vuce

Los resultados le daban un respiro en las últimas 4 jornadas, 8 de 12 puntos ganados parecían ser el principio del despertar rojiblanco y perfilarse rumbo a la liguilla.

La tabla dice 13 puntos, pero en realidad el futbol dice mucho menos, y ese fue el punto que generó la separación entre directiva y cuerpo técnico. La salida de Vucetich nos sorprendió por el momento, después de un triunfo, cuando ligaba una rachita de partidos sin perder y sobre todo, una semana antes del clásico contra América.

Pero la salida de “Vuce” estaba definida desde antes del partido contra Pachuca. El juego contra los tuzos lo confirmó, Guadalajara no tiene equipo, solamente individualidades, las mismas que le salvaron ese partido pero que también evidenciaron el principal problema del rebaño.

La directiva está harta de pagar una nómina muy alta y que no se vea el reflejo de la calidad de los jugadores en la cancha, y esa, es responsbailidad por completo del técnico. Aunque hay que decir también que este grupo ya lleva varios torneos, varios técnicos y no handemostrado para nada lo que se espera de ellos, solamente una serie de liguilla ganada frente a las águilas y paremos de contar.

El divorcio entre técnico y directiva era evidente, quizás lo único que mantenía a Vucetich era, curiosamente, el discurso de los jugadores, pero el ex “Rey Midas” se puso la soga al cuello con sus declaraciones de que era “una desventaja” dirigir a un equipo con puros mexicanos.

El momento no es para nada el adecuado, pero sacar un buen resultado en el clásico hubiera hecho imposible correr a Vucetich durante el resto del torneo, y seguramente esa fue la razón de Ricardo Peláez para terminar su relación laboral.

Ahora la presión ha disminuido para el grupo, han sumado en los últimos juegos y ya no está el técnico, pero atención, porque un par de resultados negativos volverán a hacer insostenible el ambiente, y ahí, las críticas serán más directas para Ricardo Peláez, quien deberá confirmar en la cancha la fuerte inversión que ha realizado el rebaño en los últimos años, para formar no un equipo ganador, ya por lo menos uno competitivo.