Marina operará aduanas y migración en el AICM

El director del Aeropuerto de la Ciudad de México (AICM), Carlos Velázquez Tiscareño, informó que la Secretaría de Marina quedará a cargo de la administración y operación de la Aduana y de Migración en la terminal aérea.

En conferencia de prensa en Palacio Nacional, el funcionario explicó que la medida tiene el fin de frenar la delincuencia organizada que opera en el AICM, así que la Marina dará certeza y seguridad en las operaciones de las áreas mencionadas.

“A fin de brindar mayor seguridad, a partir de febrero de 2022 se comisionaron a mil 500 elementos de la Secretaría de Marina para fortalecer la seguridad y dar un combate frontal a la delincuencia organizada que, a lo largo del tiempo, ha operado con complacencia en este aeropuerto, principalmente con una problemática crítica permanente en la zona de migración”, anunció.

No obstante, Velázquez Tiscareño es quien continuará encabezando el mando, la coordinación y gestión de seguridad del aeropuerto, es por ello, por lo que siguiendo las instrucciones del presidente Andrés Manuel López Obrador, “se creó un mando único en el AICM”.

Este último “recae en la dirección general de este aeropuerto, subordinando las aduanas al Instituto Nacional de Migración, a la Secretaría de Marina y al comandante del aeropuerto, instituciones operativas en el mismo”, apuntó el director del AICM.

Velázquez Tiscareño, resaltó que se han invertido cinco mil 914 millones de pesos en la conservación, reestructuración y reforzamiento de la cimentación del AICM durante el gobierno de López Obrador.

Rehabilitación de la Terminal 2

En el aeropuerto, actualmente, la Terminal 2 se encuentra en rehabilitación en la pista de rodaje y aterrizaje las cuales son carreteras de asfalto y se están recimentando.

Las tareas consisten en el relleno de oquedades para solucionar los hundimientos que hay en la estructura, informó la Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum Pardo.

En la rueda de prensa matutina, la funcionaria comunicó que el hundimiento del terreno ha generado oquedades entre el edificio terminal y su cimentación, además de registrar fracturas en la cimentación, las cuales, no significan un colapso en la T2.

Las tareas de rellenado durarán diez meses y, en una primera instancia, costarán 400 millones de pesos, sin embargo, se requiere que los trabajos sean constantes en un futuro.

“En este momento, de acuerdo con el Instituto para la Seguridad de las Construcciones de la CDMX, no tiene grandes riesgos, pero tiene necesariamente que intervenirse porque, si no, sí tendría riesgos ante sismos. Ya iniciamos esta intervención. Lo primero que hay que hacer es arreglar todos los contratrabes, que lo que se va a hacer es sellarlas con una técnica especial que permite que queden de manera adecuada”, puntualizó.

CAL