- Opinión
- 11/09/2023
Decisión
Sin sobresaltos ni sorpresas, Sheinbaum fue designada la virtual abanderada morenista para la elección Presidencial del 24. Lo notable, el cierre dado por las principales fuerzas políticas en torno a figuras femeninas, asegurando el manejo de los tres Poderes de la Unión en manos de talentosas mujeres. Lo lamentable, el pataleo de Ebrard, inconforme por el resultado de la auscultación, ruido innecesario ante la abismal diferencia de la intención decisoria, robando reflectores a la ganadora. Deplorable, se habla más de ello, se empañó el triunfo de la candidata. Factura grande por cobrarle, seguramente Marcelo en su momento lo vivirá.
Los mensajes tanto implícitos como explícitos no han cesado; fundamental fue la entrega del ‘Bastón de Mando’ de López Obrador a Sheinbaum. No se debe ver de manera aislada, este, sumado a la gira presidencial por Sudamérica, empoderó a la morenista con un fuerte simbolismo: ‘Te dejo el mando, me voy’.
Por su parte, la candidata rápidamente fijó posición con dos avisos, el primero, dirigido al propio perdedor inconforme, anunciándole lo inevitable, ‘Las puertas están abiertas’, hábil afirmación, con dos significados, un ’quedarse’, pero en realidad suena a un más ‘para irte’. Para todos, fue una advertencia de disciplina, no hay espacio para el disenso, las reglas fueron claras, las aceptaron, no se tolerará la discordia. Ebrard acusó recibo, se le compara con su exjefe Camacho Solís, aquella rabieta resultado de la entonces candidatura de Colosio. Se avizora, para Marcelo el mismo destino de Don Manuel: Perderse en la zona gris, recordado como una mera anécdota, luego, pasar al olvido de esta sociedad de memoria corta. Triste final.
La segunda revelación contiene un doble objetivo, en principio, destapa la candidatura de Omar García Harfuch. No dejó duda, es el favorito de la Jefa, sin vacilación, será el aspirante morenista para gobernar la Ciudad de México. El anuncio develó mano dura, la maniobra cerró las vías acordadas con Monreal, ahora disminuido, sin sombra, fue último en la encuesta, con un agregado; se abre paso a las nuevas generaciones, fijando distancia al sello distintivo de este sexenio: La adultez, paradójicamente, un país de jóvenes gobernado por ancianos.
El último, emana de la reunión del pasado jueves con Gobernadoras de su círculo, el propósito fue claro, dejar de manifiesto su proyecto, centrado en la consolidación del control político por mujeres capitaneadas por Sheinbaum.
La sumatoria presenta a Claudia resuelta, poderosa, con dominio, sobre todo ejerciendo la autoridad transmitida por el mandatario. No hay margen de cuestionamiento, es ella el factor, no el factótum.
Se inaugura una nueva era del poder.
Vendrán definiciones fundamentales: Todas las Senadurías, las gobernaturas, sus padrones son importantes para el resultado de la elección presidencial, su resolución negociadora o de imposición, revelará el carácter de gobierno para los siguientes 7 años, por supuesto, en caso de ser electa Presidenta.
En tan solo unos días, Claudia nos dio catas de su personalidad, puede no ser la más simpática de las presidenciables, pero sí, hasta hoy, la de mayor decisión, justo la necesaria para gobernar un país tan complejo como México. De paso, para alejarse de Andrés Manuel.
Añadido:
La rabieta de Ebrard descubre una desconsolidación del otrora monolítico movimiento, aflorando el individualismo natural de todo político. Esta tesis se cae si se trata de un distanciamiento fríamente calculado por Sheinbaum para dividir el voto del FAM. No se debe soslayar el guiño de MC para arropar al candidato lastimado, por cierto, Marcelo el más cercano a la maltratada clase media.