Retrato Ormeta-La Consulta Popular ¿Fue un fracaso o una llamada de atención?

Desde el inicio, el tema de la consulta para buscar enjuiciar a los expresidentes resultó en un verdadero aprieto, pues el Presidente de la República ponía sobre la mesa la propuesta de consultar al pueblo para decidir si se buscaba ejercer la acción del Estado para investigar la comisión de posibles delitos por parte de los ex mandatarios presidenciales. Esto levantó más de una ceja porque en un primer término se ponía a consulta si el Estado Mexicano realizaba o no una de sus principales funciones como lo es el de procurar e impartir justicia, y en segundo término levantaba escozor de que se llamara de nueva cuenta a los ciudadanos para acudir a refrendar o no una propuesta de campaña que claramente se respaldó con el voto popular en el 2018.

Bueno, como marca la Constitución, el tema de la validez de la consulta llegó a la máxima instancia judicial, la cual, para sorpresa de muchos declaró constitucional la consulta, pero modificó la pregunta para que el tema central ya no fuera el buscar enjuiciar a los ex presidentes sino que fuera otro tema, el cual resultó tan confuso y oscuro que nadie entendió. Así, para evitar la ira presidencial encaramada en el oriundo de Tabasco, varios ministros decidieron avalar el tema de la consulta, pero a sabiendas de que el tema original que se quería preguntar resultaba inconstitucional, entonces decidieron modificar la pregunta. Una cuestión tan aberrante, tan poco clara que hasta la fecha nadie sabe que se le pregunto a la ciudadanía. Así, el impulso presidencial busco que hubiera una consulta y los ministros le regalaron una pregunta aberrante que nos costó millones de pesos.

De tal forma que, el pasado domingo se acudió a las urnas a votar la famosa consulta popular. Un ejercicio que necesitaba de la participación del 40% del padrón electoral para que su respuesta fueran vinculante a las instituciones del Estado Mexicano; sin embargo, la participación de la ciudadanía apenas alcanzó el 7% esto a pesar de la millonaria propaganda publicitaria que pago MORENA para su difusión y de la promoción que durante varias mañanas realizó el presidente de la República. De ahí que, esta escaza participación en la primera consulta popular en México tiene varios mensajes políticos que nuestros gobernantes deben anotar si quieren seguir detentando el poder.

Una de estas señales que se prendieron, fue que la base social que representaba el lopezobradorismo ha perdido fuerza. Su voto duro no secundó del todo la apuesta presidencial de buscar por medio de un ejercicio democrático resolver una cuestión tan trascendental como la búsqueda de la justicia. Es más, las imágenes que circularon el pasado domingo demuestran que la ciudadanía no digiere tan fácilmente el discurso presidencial, ni están dispuestos a apoyar ciegamente los caprichos y ocurrencias presidenciales. Ha llegado el momento en el sexenio en que la realidad de los problemas del país sobrepasan la narrativa del gobierno en turno y los ciudadanos son conscientes de ello, por eso el castigo mediante el abstencionismo.

Más aún, la consulta popular tuvo una excelsa organización por parte de la autoridad electoral, pero no levantó el ánimo entre los ciudadanos, por lo que, fue un fracaso total de aquellos que impulsaron este primer ejercicio. En esa línea, por más que quieran culpar de este fracaso a otros entes del Estado, lo cierto es que el fiasco es atribuido al partido gobernante que no tuvo la capacidad para incidir en el ánimo ciudadano para que se fuera a las urnas y también es una dura llamada de atención para el inquilino de Palacio Nacional de que los electores no van a seguir apoyando todas sus ocurrencias.

Omerta: Vaya período de sesiones que se viene en la Suprema Corte de Justicia de la Nación, pues tienen en frente la resolución de trascendentales resoluciones como lo es la nada menos que la ampliación de la duración en el cargo del ministro presidente…