“Solo es una tosecita” – Reflexiones del Galeno

A lo largo de mi carrera siempre me ha generado curiosidad lo fácil que es para las personas adaptarse y seguir con su vida. Es decir, nos llegan pacientes que dejaron avanzar tanto un padecimiento que resulta difícil de creer, es relativamente frecuente encontrase con articulaciones irreconocibles en pacientes diabéticos que dejaron crecer una infección por que no les producía dolor y decidieron no tratarla, tumores enormes que por miedo a saber qué son, los ignoran y aprenden a vivir con ellos. Inclusive es frecuente encontrar a  personas que viven con dolores crónicos, que no buscan ayuda por miedo a que sea algo “malo”.  Imaginen, si es todo un reto que un paciente acuda a valoración por problemas así de graves, cuanto más difícil es que pongan atención a síntomas simples como la comezón, el hormigueo o la tos.

Quiero dedicar esta columna a uno de los síntomas más difíciles de abordar de manera aislada, la tos. La idea de esta columna me vino después de que me preguntaran ayer “ Juan Carlos, tengo una tosecita molesta desde hace mucho ¿Qué crees que sea?” Para serles honesto, contestar esa pregunta sin hacer muchas más sería imposible, hay decenas de enfermedades que te pueden dar un tos crónica, sin embargo, pensé que si bien, es difícil llegar a un diagnóstico partiendo solo desde la tos, es muy fácil saber que algo anda mal cuando alguien es tosedor crónico y pensé en una idea clara y contundente para ustedes, fácil de llevar a casa, tener tos por muchos días no es normal.

La tos es un reflejo protector que produce la expulsión abrupta de aire desde los pulmones, además esta expulsión es potenciada por la contracción simultanea de los músculos de accesorios de la respiración, es útil para mantener despejada la vía respiratoria y la garganta, se produce en respuesta a estimulación de receptores, esta estimulación puede ser desencadenada entre otras cosas por un proceso inflamatorio, infeccioso, irritativo o por presencia de un cuerpo extraño o secreción.  Sin el reflejo de la tos, hasta tomar un té serie potencialmente mortal. Sin embargo, la presencia de tos siempre obedece a un desencadenante, si tomas agua y te atragantas comenzarás a toser, ese es el desencadenante, en una infección por covid, la infección es el desencadenante y la tos puede persistir inclusive después de la infección. Sin embargo, en el caso de esa tos, sin explicación, que no resulta molesta y que creemos que solo está porque sí, siempre debe haber un desencadenante, pudiendo ser simplemente la contaminación ambiental, demasiado tabaco o el inicio de una enfermedad que requiere atención.  

Se habla de tos crónica cuando es mayor a 3 semanas. Suele ser una tos insidiosa, progresiva, que no causa mayor molestia que toser. Para este punto, toda tos mayor a 3 semanas debe ser abordada por un médico clínico que pueda orientar al paciente hacia el área correcta. Aun cuando clínicamente parece insignificante,  la importancia de indagar radica en que puede ser el síntoma pivote de un cuadro potencialmente reversible. Algunos ejemplos de enfermedades que pueden debutar con tos crónica son: Enfermedad por reflujo esofágico, Insuficiencia cardiaca, enfermedad pulmonar obstructiva crónica, enfermedad pulmonar intersticial, neumoconiosis, infecciones crónicas por los agentes causales de la tuberculosis, tosferina, coccidiomicosis, histoplamosis y demás.

Así que ya lo sabes, a ese amigo que tiene una tosecita hay que prestarle atención.

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